Fin del Título 42: afirman que las solicitudes de asilo se deberán tramitar en la aplicación CBP One

El fin de la aplicación del Título 42, una medida de salud pública que desde 2020 impuso restricciones a los migrantes que en la frontera de México y Estados Unidos solicitaron asilo o amparo migratorio, no significará el procesamiento inmediato y la aceptación de todas las solicitudes a partir de este viernes, ya que deberán ser tramitadas a través de la aplicación CBP One, que se debe descargar en los teléfonos celulares.
Así lo afirmó Pedro de Velasco, director de educación e incidencia en Iniciativa Kino para la Frontera, organización humanitaria que brinda asistencia a migrantes en la frontera entre ambos Nogales, en Arizona y Sonora, uno de los cruces fronterizos donde se aguarda con expectativa el fin del Título 42, que comenzó a aplicarse en marzo de 2020, durante la pandemia, y que estará vigente hasta el último minuto de este jueves.
Aplicado por la Administración Trump para rechazar rápidamente por motivos de salud pública la solicitud de asilo de migrantes en la frontera, el Título 42 se utilizó desde entonces como una política migratoria que ahora -con la Administración Biden- llega a su fin, aunque De Velasco aseguró que “desafortunadamente no es la primera ni va a ser la última medida para bloquear” las solicitudes de asilo de los migrantes, que en los últimos años llegaron desde varios países a México, hasta la frontera sur de Estados Unidos.
“Si bien se va a terminar el Título 42, no significa que las personas ya van a poder acercarse a ejercer su derecho al asilo, sino que van a continuar estando restringidas por otras políticas. Se prevé que la única manera en que una persona que está huyendo de violencia, de persecución va a poder solicitar ser admitida en Estados Unidos para iniciar el proceso de asilo va a ser mediante una aplicación que se debe descargar en teléfonos celulares, que se llama CBP One. La persona va a poder obtener una cita para presentarse en un puerto de entrada en un día específico a una hora específica para poder ser admitida, y entonces sí, una vez dentro de Estados Unidos, poder iniciar el proceso de asilo”, señaló De Velasco en La Hora del Cafecito☕, el programa de radio de Conecta Arizona.

El representante de Iniciativa Kino para la Frontera dijo que, ante el fin del Título 42, además “se contempla que quienes ingresen por un lugar que no sea puerto de entrada van a ser procesados bajo el Título 8”, por lo que “pueden ser deportados de manera expedita, procesados rápidamente y retornados a sus países de origen o a México”. “También van a poder aplicarles las consecuencias de entrada y reentrada ilegal, por lo que a quien ingresa evadiendo el puerto de entrada sin los documentos necesarios le pueden dar cargos criminales”, agregó.
De Velasco también consideró necesario “ver a la migración como una oportunidad” y no como “un problema”, por lo que los migrantes “necesitan y merecen ser acogidos y bienvenidos en Estados Unidos”. Entrevistado por Maritza L. Félix, directora y fundadora de Conecta Arizona, De Velasco señaló que Estados Unidos “está listo” para recibir a los migrantes más allá de un aumento inicial en el flujo migratorio en estos días, descartó que se trate de “una invasión o un desborde” y llamó a colaborar como voluntarios con las organizaciones que los asisten en la frontera.

🎙️ El Título 42 se basa en una ley de salud pública promulgada en 1944 que permite limitar la migración a fin de proteger la salud pública. Con la pandemia de Covid-19, se utilizó para frenar las peticiones de asilos de los migrantes que llegaron a puertos de entrada a solicitar un amparo migratorio bajo la premisa de que no se sabía si podían representar un riesgo a la seguridad nacional a través de la salud pública. Desde Tucson, donde has trabajado en los últimos años en el tema, ¿qué está pasando en la frontera? Estamos viendo que en Texas están poniendo alambres de púas, que los puertos fronterizos de Nogales se están preparando para abrir y cerrar rápidamente en dado caso de que sean muchos los migrantes que se acerquen después de que se termine el Título 42. ¿Qué va a pasar, qué estás viendo?
“Tenemos ya más de 3 años en que se ha estado utilizando el Título 42 como la excusa, el mecanismo para bloquear a las personas que buscan asilo en Estados Unidos. A partir del 20 de marzo de 2020 se empezó a utilizar esta medida. Hay que partir de explicar que cuando una persona huye de violencia, de persecución, puede acercarse a un tercer país para buscar esta protección humanitaria. El tema es que Estados Unidos no es la primera vez que utiliza alguna política pública para reducir o bloquear que las personas puedan ingresar. El Título 42 desafortunadamente no es la primera ni va a ser la última medida para bloquear. Y ese es el tema, que a lo largo de estos tres años las personas no han podido efectivamente acercarse a solicitar la protección, la asistencia humanitaria y han sido forzadas a permanecer en México. Aunque en cualquier lugar de Estados Unidos se puede ver que nadie está utilizando el cubrebocas y que las medidas (por la pandemia) ya se han relajado, en la frontera, hasta las 23.59 horas del 11 de mayo, va a seguir esta medida en vigor, bloqueando el acceso con el tema de la pandemia del Covid-19, con la excusa de mitigar el contagio. Si bien se va a terminar el Título 42, no significa que las personas ya van a poder acercarse a ejercer su derecho al asilo, sino que van a continuar estando restringidas por otras políticas. Se prevé que la única manera en que una persona que está huyendo de violencia, de persecución va a poder solicitar ser admitida en Estados Unidos para iniciar el proceso de asilo va a ser mediante una aplicación que se debe descargar en teléfonos celulares, que se llama CBP One. Mediante esta aplicación va a poder obtener una cita para presentarse en un puerto de entrada en un día especifico a una hora específica para poder ser admitida y entonces sí, una vez dentro del territorio estadounidense, poder iniciar el proceso de asilo. Igualmente se contempla que quienes ingresen por un lugar que no sea puerto de entrada van a ser procesados bajo Título 8, es decir pueden ser deportados de manera expedita, procesados rápidamente y retornados a sus países de origen o a México, con el que Estados Unidos tiene estos acuerdos; también van a poder aplicarles las consecuencias de entrada y reentrada ilegal, por lo que a quien ingresa evadiendo el puerto de entrada sin los documentos necesarios le pueden dar cargos criminales. Esa es la realidad que estamos viendo. Hay que partir también del punto de que mientras queramos ver a la migración como un problema, pues claro que va a seguir siendo un problema. Mientras estemos tratando de contenerla y frenarla, no va a haber política que tenga éxito porque no se parte del reconocer la necesidad y desesperación de las personas que están migrando. Cuando empecemos a ver a la migración como una oportunidad, entonces va a ser eso, una oportunidad. Ese es el tema: no se trata de una crisis, de un problema a resolver, sino de que nuestros hermanos y hermanas migrantes necesitan y merecen ser acogidos y bienvenidos en Estados Unidos”.

🎙️ Ahora que el Título 42 expira al primer minuto del viernes, la gobernadora de Arizona Katie Hobbs envió una carta al presidente Biden, al secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, y a los senadores Kyrsten Sinema y Mark Kelly para pedirles más recursos y en Tucson dio una rueda de prensa para presentar un plan de 7 millones de dólares que estará disponible, dijo, “de manera inmediata para transportación, albergue, operaciones de seguridad pública”. Y va a tratar de que esos migrantes que crucen la frontera no se queden en los mismos puertos fronterizos, que no se queden en ciudades fronterizas como Nogales o Yuma, sino que sean trasladados quizás de Douglas hasta Tucson. Dijo que no quiere que organizaciones sin fines de lucro como la que tú representas tengan que levantar la factura de un sistema de inmigración roto. ¿Qué opinas de este plan?
“Lo primero que hay que agradecer es este reconocimiento de que las organizaciones no gubernamentales actuamos en las lagunas y vacíos que deja precisamente el gobierno. Entonces, si por varios años ha estado esta política restrictiva pues a nosotros nos ha estado tocando responder a las necesidades de la población, lo cual hacemos con gusto. Lo cierto es que hay otras muchas organizaciones en Estados Unidos que también están haciendo una labor increíble como es el caso de Catholic Community Center-Casa Alitas en el caso de Tucson, o el Centro Mariposa en Phoenix. Ellos están listos y preparados; obviamente manos nunca sobran, por eso se aceptan voluntarios. Pero sí, es muy importante eso que está reconociendo la gobernadora. Aunque ahorita Nogales es el único puerto de entrada en Arizona por el cual una persona migrante puede ser procesada, hay que ver exactamente qué otros puertos van a ser incluidos para que las personas puedan ingresar. Las personas (que ingresan) ya tienen en su mayoría alguien de apoyo: tienen familiares o conocidos esperando, que están en muchas ocasiones solventando los gastos de estas personas. Lo que necesitan es poder llegar a un lugar seguro, alguien que les oriente por ejemplo en cómo obtener un boleto de avión o de autobús para que puedan hacer el viaje para reencontrarse con sus familiares o con las personas que los están apoyando para que puedan llegar a un lugar seguro. Son muy pocos quienes permanecen en el sur de Arizona o en el sur de Texas o de California, porque ya tienen su red de apoyo a lo largo y ancho de Estados Unidos. Entonces, el tema es favorecer que esta transición se pueda dar de una manera ordenada y segura, que las personas no sean simplemente admitidas en el puerto de entrada y liberadas en la calle a su suerte en un país extraño, que no conocen, sino que haya esta recepción y esta canalización hacia los servicios y recursos que necesiten”.

🎙️ La pregunta es: ¿estamos preparados para recibirlos? La Administración dice que podrá ser caótico en las próximas semanas pero que sí, pero la opinión pública no favorece este comentario, dice que no estamos listos para recibirlos. Hemos estado viendo la cobertura mediática que dice que son más de 150 mil personas esperando cruzar a Estados Unidos y creo que la percepción que hay es que van a estar todas atrincheradas junto a la frontera y que van a estar empujando las rejas para venir a Estados Unidos. Pero, como bien nos explicaste, no es así y se necesita una cita y un puerto de entrada autorizado. ¿Crees que al interior de Estados Unidos estamos listos para abrir las puertas, no abrir las puertas a todos, sino abrir las puertas al proceso migratorio que les permitiría entrar al país?
“Sí, definitivamente estamos listos. Sí puede representar tal vez un reto sobre todo al principio, pero quiero recordar cuando el 20 de marzo de 2020 se limitó el ingreso al asilo con el Título 42 también se limitó los viajes no esenciales, es decir personas que no fueran ciudadanas residentes de Estados Unidos o con una visa válida que les permitiera entrar y salir no podían hacerlo. Esta limitación al viaje no esencial permaneció desde marzo de 2020 hasta el 8 de noviembre de 2021. Y recuerdo que en esa ocasión hubo largas filas de coches y personas que estaban esperando cruzar finalmente después de más de año y medio de no poder hacerlo. Hubo reunificaciones familiares, personas que finalmente pudieron ir a comprar ropa o a visitar lugares, y también se reabrió el comercio en ciudades como Nogales-Arizona, que (en la pandemia) estuvieron prácticamente como pueblos fantasmas, porque son comunidades muy ligadas con sus vecinos en el lado sur de la frontera y cuyas economías dependen una de la otra. ¿Qué sucedió en ese momento? Efectivamente hubo ese incremento y largas filas, porque se creó ese cuello de botella en el que nadie o casi nadie podía pasar y muchas personas estaban esperando para hacerlo. Pero a medida que pasaron los días, incluso en cuestión de semanas, el flujo y el tránsito se normalizó y ahorita no estamos hablando pues de estas tres, cuatro, cinco horas de espera, sino que ya es un proceso normal. De vez en cuando en días festivos que todo el mundo decide viajar a México es diferente, pero ya se normalizó. Y es la misma situación (ahora con el Título 42): puede ser que en un principio pueda haber un flujo importante de personas, pero esto se debe precisamente a que por más de tres años no hubo posibilidad para que estas personas se acercaran a solicitar asilo. Sí creo que hay muchos medios de comunicación que irresponsablemente están alentando esos sentimientos de temor, de pánico, de caos, incluso de xenofobia, y hay que tener mucho cuidado. Si realmente estamos preocupados por si vamos a tener capacidad o no de respuesta, invitaría a quienes nos escuchan a que ofrecieran su tiempo para apoyar, para recibir, para darle la bienvenida a esas personas migrantes que en muchas ocasiones van a necesitar. Como digo, manos no sobran, haga voluntariado en Casa Alita, en el Centro Mariposa en Phoenix, en Iniciativa Kino para la Frontera, porque efectivamente sí van a haber personas adicionales llegando, pero no como se quiere presentar en el sentido de una invasión, un desborde. Esa es la narrativa que muchas veces se quiere utilizar, desafortunadamente para fines políticos. La realidad, y yo voy casi todos los días al sur de la frontera, a Nogales-Sonora, no es que estemos teniendo esos cientos de miles de migrantes que se está mencionando. No, tenemos familias que han estado esperando para poder tener una oportunidad de ser escuchadas, de que alguien ponga atención y revise la situación que las está obligando a emigrar, porque ya no es una migración de tipo económica sino forzada por la violencia que están sufriendo en sus lugares de origen, y necesitan esta protección, ser acogidas y protegidas”.
